Indugraf: Año nuevo de lucha

Los trabajadores de Indugraf están por cumplir un mes de ocupación de la planta. Los compañeros se encuentran custodiando la fábrica desde que la patronal la abandonó, después de acumular una enorme deuda por salarios atrasados, aportes jubilatorios y de obra social, para finalmente pretender despedir, sin un peso de indemnización, a sus 90 trabajadores. Han sido, tomando en cuenta las semanas previas de movilización y acampe, más de 40 días de intensa lucha. Los trabajadores tuvieron que enfrentar una acusación de "usurpación", aun vigente, impulsada por el vaciador Carlos Martínez. Frente a restricciones, medidas represivas que pretendía imponer la fiscalía y la constante amenaza de desalojo, los trabajadores se movilizaron con sus familias al juzgado, donde explicaron la situación de la fábrica y el proceder fraudulento de la patronal. En el juzgado les dijeron que estaban estudiando la causa penal por vaciamiento que ahora recae sobre Martinez y que no había ninguna intención de desalojarlos. Los trabajadores se fueron conformes, pero más dispuestos que nunca a defender la fábrica. Para afianzar la ocupación y organizar su defensa, los compañeros han comenzado a organizar la solidaridad que llega permanentemente a la fábrica. En la puerta hay un acampe permanente, los obreros recorren distintos sindicatos y lugares de trabajo difundiendo el conflicto y juntando fondo de huelga. Tuvieron una participación central en la movilización del 20 de Diciembre y vienen de armar un gran acto obrero, con una importante presencia de delegados fabriles, cooperativas obreras, organizaciones estudiantiles y una importante presencia del gremio grafico impulsada por la Naranja. Los compañeros despedirán el año en la planta, junto a sus familias, luchando contra el cierre de la fábrica. Preparan una movilización al Ministerio de Trabajo que intimó a la patronal pero sin garantizar su ejecución. Irán a reclamar la reapertura de la fuente de trabajo con todos los trabajadores adentro y respetando las condiciones del convenio colectivo, y medidas urgentes que ayuden a paliar la situación desesperante en que los ha dejado la patronal vaciadora. Como los compañeros dicen en sus comunicados: ¡Ni una familia en la calle, ni un libro menos, ni una fábrica cerrada! Pablo Vinas (congresal Federación Gráfica Bonaerense, Lista Naranja)